La Escuela de Derechos Humanos dio inicio este miércoles al programa de formación para la Implementación desde la Defensoría del Pueblo de los Centros Integrales de Resolución de Conflictos, que se conformarán en el marco de la Gran Misión A Toda Vida Venezuela.
En este proceso, que tendrá una duración de 60 horas académicas, serán capacitadas 80 personas egresadas de la Escuela, con el fin de que adquieran conocimientos integrales y especializados sobre las políticas y directrices generales la Misión, y el rol que le corresponde desempeñar a la institución en esta política de seguridad.
La Directora Ejecutiva de la Defensoría, Hilaria Márquez, explicó que la DdP participará en el tercer vértice de la Misión que se refiere es la transformación del sistema de justicia, a través de mecanismos alternativos de resolución de conflictos.
En este sentido, indicó que los participantes recibirán información sobre las atribuciones y competencias de la Defensoría del Pueblo, el Programa Haciendo Comunidad para los Derechos Humanos, además de los trámites y sustanciación de expedientes, la mediación, conciliación, planificación y diagnóstico comunitario, que son las herramientas básicas que requieren para laborar en estos centros.
"Al culminar el proceso formativo se iniciará a un proceso de entrevistas para seleccionar al grupo que laborará en los primeros 17 centros que se instalarán en las nuevas urbanizaciones que se están desarrollando en el Área Metropolitana de Caracas", dijo.
Asimismo, Márquez destacó que estas personas además de manejar conocimientos teóricos y destrezas técnicas para afrontar los retos que imponen a los derechos humanos, deben tener vocación de servicio, sensibilidad humana, disposición y ganas de trabajar en las comunidades, "porque es allí donde van a trabajar, donde deben buscarles soluciones y alternativas inmediatas a los problemas cotidianos".
La Institución Nacional de Derechos Humanos trabajará conjuntamente con representantes de distintos entes del Estado con competencia en la materia, para impulsar la prevención, mediación y resolución de conflictos como alternativa para lograr la disminución de los índices de violencia en el país.
Fuente: Defensoría del Pueblo
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